Cuando Beth y Rick Hutchinson (ambos de Estados Unidos) le dieron la bienvenida al mundo a su hijo el 5 de junio de 2020, varios meses antes de lo previsto, era tan pequeño que apenas cabía en la palma de una de sus manos.
Con un peso de 340 gramos (11,9 oz), más o menos lo mismo que una lata de sopa, o una décima parte del peso medio de un recién nacido a término, el pronóstico inicial para Richard Scott William Hutchinson no era muy optimista.
De hecho, tras su traslado a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN) del hospital Children's Minnesota de Minneapolis, los médicos se sintieron obligados a preparar a sus padres para lo peor.
"Cuando Rick y Beth recibieron asesoramiento prenatal sobre qué esperar de un bebé nacido tan pronto, el equipo de neonatología les dio un 0% de posibilidades de supervivencia", dijo la neonatóloga de Richard en el Children's Minnesota, la Dra. Stacy Kern.
"Sabía que las primeras semanas de la vida de Richard iban a ser muy difíciles, pero sentí que podía superarlo y sería un sobreviviente".
A pesar de que la fecha prevista para el parto era el 13 de octubre de 2020, Beth sufrió complicaciones médicas y se puso de parto inesperadamente casi cuatro meses antes de lo previsto. Tras una intensa discusión con los médicos, se acordó un plan para dar a luz a Richard y luego hacer todo lo posible para mantenerlo.
Richard nació con una edad gestacional de 21 semanas y 2 días, por lo que fue 131 días prematuro. El periodo gestacional estándar para un bebé es de 40 semanas.
El 5 de junio de 2021 cumplió un año, un hito para cualquier niño, pero aún más para el "bebé milagro" Richard. Guinness World Records también aprovechó este acontecimiento para reconocerlo oficialmente como el bebé más prematuro que ha logrado sobrevivir.
Esto supera el título de récord que se mantuvo durante tres décadas y media. James Elgin Gill, hijo de Brenda y James Gill (todos ellos canadienses) en Ottawa, Ontario, Canadá, con una edad gestacional de 21 semanas y 5 días, es decir, 128 días antes de tiempo, el 20 de mayo de 1987.
Más recientemente, los informes indican que esta cifra fue igualada por Frieda Mangold, nacida de Yvonne y John Mangold (todos alemanes) en Fulda, Alemania, el 7 de noviembre de 2010 a la misma edad.
"No parece real", admitió Beth, cuando se le preguntó qué se siente al haber establecido un récord tan difícil de batir.
"Todavía estamos sorprendidos por ello, estamos muy contentos. Es una forma de compartir su historia y concientizar al mundo sobre los nacimientos prematuros".
Richard vio en su primer cumpleaños en casa con sus padres y otros parientes; tanto Beth como Rick provienen de familias numerosas. También tienen tres perros, con los que aparentemente a Richard "le encanta pasar el rato".
Sin duda ha sido un año duro para la familia Hutchinson. Además de la preocupación y el estrés naturales de saber que las probabilidades estaban en contra de su hijo, el COVID-19 significaba que no podían pasar la noche con Richard ni compartir algunas de las tareas de visita con otros miembros de la familia.
Esto significaba que Rick y Beth hacían el viaje todos los días a través de la frontera estatal desde su casa en el condado de St Croix, Wisconsin, hasta Minneapolis, Minnesota, para pasar todo el tiempo posible con su hijo.
"Nos aseguramos de estar allí para darle apoyo", dijo Rick. "Creo que eso le ayudó a superar esto porque sabía que podía contar con nosotros".
Sus visitas diarias incluyeron la celebración de algunas "primeras" fiestas clave, como el 4 de julio (que coincidió con el cumpleaños de un mes de Richard) y Halloween.
La Dr. Kern cree que la dedicación de Rick y Beth desempeñó un papel fundamental en el éxito de su hijo.
"Atribuyo su milagrosa supervivencia a sus maravillosos padres, que estuvieron a su lado en todo momento, y a todo el equipo de neonatología del Children's Minnesota.
Rick y Beth lucharon por Richard día tras día y nunca dejaron de proteger a su bebé en todo momento. Su fuerza y capacidad para mantenerse positivos y esperanzados fue impresionante, incluso en los momentos más estresantes y difíciles. - Dr. Stacy Kern, neonatólogo de Children's Minnesota- Dr Stacy Kern, Children’s Minnesota neonatologist
Como es de esperar, los primeros meses fueron los más difíciles. "El primer mes ni siquiera estaban seguros de que fuera a salir adelante", revela Beth.
"Fue muy duro. Sabes en el fondo de tu mente que sus posibilidades no eran grandes".
Sin embargo, inspirados por la capacidad de recuperación de su hijo, se aseguraron de que se les permitiera el acceso y se les mantuviera continuamente informados de los últimos acontecimientos.
El consejo que Beth le da a otros padres de bebés prematuros es que no se rindan.
"Intercedan por su hijo todo lo que puedan. Sé entrometido porque es tu hijo y mereces saber lo que está pasando".
Seis meses después, Richard iba viento en popa, desafiando todas las expectativas.
A principios de diciembre de 2020, tras más de medio año en la UCIN, le dieron el visto bueno para abandonar el hospital y volver a casa.
Fue un día muy emotivo, no sólo para la familia, sino también para el equipo médico que había acompañado a Richard en todo momento. La Dr. Kern nos dijo: "El día en que Richard fue dado de alta de la UCIN fue un día muy especial. Recuerdo que lo levanté de la cuna y lo sostuve con lágrimas en los ojos.
"No podía creer que fuera el mismo niño que una vez estuvo tan enfermo que temí que no sobreviviera. El mismo niño que una vez cabía en la palma de mi mano, con una piel tan translúcida que podía ver cada costilla y vaso de su pequeño cuerpo. No pude evitar apretarlo y decirle lo orgullosa que estaba de él.
"Me enseñó lo que realmente significa ser resistente y, cada vez que lo miro, me recuerda lo fuertes y asombrosos que son todos estos pequeños y hermosos bebés".
Sin embargo, no estaba completamente fuera de peligro, ya que seguía necesitando revisiones periódicas y dependía de algunos equipos de asistencia en el día a día. "Creo que los dos estábamos preocupados", dijo Beth.
"Cuando llegó a casa, seguía con oxígeno, una máquina de oxímetro de pulso y una bomba para su sonda de alimentación.
"Estamos trabajando para sacarlo de todas aquellas maquinas, pero eso lleva tiempo. Ha recorrido un largo camino y lo está haciendo muy bien".
Los Hutchinson sólo sienten la mayor admiración y gratitud por los médicos y enfermeras que atendieron a Richard en el Children's Minnesota.
El equipo más increíble", dijo Beth. "Nos encanta el personal que cuidó de nuestro hijo, y nos gustaría poder compartirlo con ellos todo el tiempo. Le llamaban el 'bebé milagro' cuando estaba allí. Estoy de acuerdo con ellos".
Es un bebé muy feliz. Siempre tiene una sonrisa en su adorable carita. Sus ojos azules brillantes y su sonrisa me atrapan cada vez - Beth Hutchinson
La Dra. Kern se considera afortunada por haber participado en la historia de Richard, que ha batido un récord mundial.
"Richard es el bebé más joven que he tenido el honor de cuidar. Me siento tan bendecida y honrada de haber sido la neonatóloga de guardia la semana en que nació Richard. Ser parte de su increíble historia... No puedo expresar con palabras lo increíble que se siente".
"Creo que la historia de Richard ha inspirado a mucha gente en todo el mundo y creo que todos seguiremos aprendiendo de él. Gracias, Richard, Beth y Rick por todo lo que nos habéis enseñado. Estamos deseando ver lo que os depara el futuro".
Todas la imágenes son cortesía de Rick and Beth Hutchinson
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