Coca-Cola quería celebrar la fuerza de la familia venezolana que siempre mantiene unida en frente de cualquier cambio, obstáculo, reto que se presente. En este caso Guinness World Records lanzó un desafío nuevo que solamente se puede lograr compartiendo en equipo. El record fue la servida más larga de una bebida en cadena humana – cada persona llevaba una botella y un vaso en cada mano y tuvo que servir el vaso de su vecino.

Coca-Cola prepararon una mesa impresionante de 182 metros de largo en forma de una botella de la emblemática bebida – pudo acomodar 550 personas que participaron en el intento de record. El record llevó a cabo en el Centro Comercial Tamanaco que fue sitio a otro record venezolano en 2012 – la mayor cantidad de mujeres aplicando lápiz labial a la vez.

Es la primera vez que Coca-Cola rompe un record en Venezuela y Jeremy Romero, gerente de la marca en el país sudamericano, fue muy contento con el resultado comentando que “la mesa invita al dialogo y al encuentro. Nos da identidad, sentido de pertenencia y proyección a futuro. Esta actividad, fresca y atractiva, nos brinda la posibilidad de descubrir que cuando comemos juntos formamos parte de algo más grande que nosotros mismos. Esa es la intención de este record de Guinness World Records; si con ello hicimos posible una reflexión en este sentido nos damos por satisfechos”.

Luego del record los participantes sentaron para compartir un almuerzo tradicional con hallaca (un tamal llenó de carne, pollo y cerdo), Pan de Jamón y Ensalada de Gallina. Las familias festejaron en equipo igual como han trabajado en equipo para lograr este nuevo record para Venezuela.